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miércoles, 2 de septiembre de 2009

No viajéis nunca con tres bultos

Éste fue mi equipaje para mi periplo neerlandés:


Son 3 piezas, de las cuales sólo las dos pequeñas son admisibles como equipaje de mano. Tenía 20kg de facturación y 12kg de mano, así que podía montármelo para llevar 32kg, pero facturando la pequeña y la grande, llevando la mediana en cabina. La primera faena fue cuando el peso dio 20.5kg, aunque la señora me dijo que estaba bien. En casa me daba menos, así que comparto la opinión de Lorena de que, o el equipaje crece al viajar hasta el aeropuerto, o las básculas de facturación están trucadas. Mientras no se jodió el asa de la grande, llevaba en una mano la grande, en otra la mediana, y la pequeña a la espalda. Sólo pude utilizar el modo carrito de la mediana desde la facturación hasta la recogida de equipajes. Para facilitarme la movilidad cuando ya la grande estaba jodida, agarré la pequeña a la mediana para hacer un único bulto a la espalda. Si el carrito hubiera estado bien, habría sido una buena solución el unir las dos mochilas, pero como estas cosas pasan, es mejor hacer un solo bulto de facturación y uno solo de cabina. Eso, o que se puedan reagrupar los bultos fácilmente.

14 horas de viaje

Éste fue el plan de viaje:
6:30 Salida de Palacios en coche
7:30 Salida de Burgos en la Continental
10:20 Llegada a la Avenida de América
10:40 Llegada al andén del metro
11:15 Llegada a Barajas viejo
13:10 Apertura del embarque
16:15 Llegada Ámsterdam-Schiphol
17:18 Salida del tren en Schiphol
19:53 Llegada del tren a Groningen
20:03 Salida del autobús urbano
20:18 Me bajo en la calle Zonnelaan
20:xx Búsqueda de la residencia BNC

El maletero de la Continenal estaba atestado, y creo que fue ahí donde me jodieron el asa la maleta grande. Al llegara a Madrid ya estaba floja, aunque funcionaba perfectamente en modo carrito. El las mazmorras de la Avenida de América dejó de funcionar el carrito, por lo que empezó a sufrir el asa. Creo que fue al bajar en Groningen cuando se terminó de joder el asa, o fue al baja del autobús, pero ya estaba para el arrastre cuando tuve que buscar la residencia por Plutolaan.


Así se quedó la pobre maleta. No sé podrá hacer más viajes.

Señales de vida

Hola, estoy en Groningen, una ciudad tan universitaria como Salamanca situada al norte de los Países Bajos. Después de haber podido configurar correctamente el wifi VPN, doy señales de vida mediante este blog que empecé el año pasado con el mismo propósito, sólo que ahora no hay jet-lag. En la próximas entradas narraré mis peroipecias hasta llegar aquí. Os recuerdo que podéis suscribiros a este blog por RSS, así no tenéis que comprobar si he escrito algo nuevo.